COMUNICACIONES / NOTICIAS
Moscú.- “El mundo está demostrando en la práctica, en el caso de la comercialización del petróleo y sus derivados, que hace falta una canasta de monedas. Y Venezuela propone instrumentar el uso de monedas y criptomonedas. La misma Unión Europea acaba de decidir el hacer todo sus intercambios, compras y ventas en materia energética a través de Euros y poner el dólar a un lado”, expresó el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro.
Tales declaraciones la ofreció el Primer Mandatario durante una rueda de prensa desde Moscú, junto al presidente Vladimir Putin y un grupo de empresarios rusos, donde destacó la necesidad de consolidar un sistema monetario independiente, adaptado a la realidad de un mundo que avanza a pasos agigantados hacia la multipolaridad.
Durante el encuentro se llevó a cabo la firma de contratos para garantizar una inversión petrolera por encima de 5 mil millones de dólares que elevarán la producción en las empresas mixtas, donde participan los socios rusos con cerca de un millón de barriles diarios.
En torno al tema de la necesaria diversificación monetaria dentro de las transacciones en materia energética, el presidente Maduro dijo que “Venezuela cuenta con el Petro. Progresivamente vamos a vender toda nuestra producción petrolera en Petros. Para el año 2019 tenemos un cronograma para lograrlo de manera paulatina”.
En tal sentido, advirtió el Jefe de Estado que a través de esta criptomoneda, la primera en el mundo respaldada por la riqueza petrolífera y mineral del subsuelo venezolano, “seguiremos liberándonos de una moneda que la utiliza la élite de Washington para chantajear, para agredir a los pueblos del mundo, para hacer daño económico, para perseguir financieramente como persiguen a Venezuela, a Cuba, a Irán, a Rusia”.
Recordando que el Derecho Internacional prohíbe la utilización de monedas como mecanismo de coacción y amenaza política, el presidente Maduro concluyó que: “Para ser multipolar, justo y equilibrado, el mundo necesita un sistema monetario equilibrado, justo, diverso, donde el dólar entre como una moneda de intercambio muy importante, pero que no sea utilizada como mecanismo político”.